ROBERTO CASTILLA: EL ARTISTA DE LA MITOLOGIA.
Por: Armando Fuentes Medrano.
Primeros Años.
Conocí a Roberto Castilla en el año de 1994, cuando en compañía de un grupo de inquietos lideres culturales, artistas y muchas otras personas interesadas en la cultura samaria se le dió vida a la Asociación de Artistas Plásticos del Magdalena, en la sede de "Galeria Santa Marta", ubicada en aquel entonces en la carrera 2a. entre calles 19 y 20, de la ciudad de Bastidas.
Este artista nació en Santa Marta el 30 de marzo de 1957, y dió comienzos a sus estudios pictóricos en la Escuela de Bellas Artes de Santa Marta, con una beca que le consiguiera una religiosa llamada Clara, amiga de la familia donde su madre oficiaba como doméstica, en labores de planchado, oficio este con el cual subsistian él y los suyos.
En la Escuela de Bellas Artes tuvo como profesores a los maestros, ya fallecidos, Antonio Sánchez (Modelado) y a Pedro Nel Ocampo (Dibujo), este último en el curso de dibujo artístico, que lo llevaria a dedicarse años más tarde al óleo; en esta técnica se fué afianzando con el correr de los años y perfeccionando sus estudios de dibujo en las Escuela Argentinas, complementadas, a su vez, por la Publicidad, ambas a distancia por correspondencia y de lo cual le sacaria mucho provecho.
La niñez del artísta se desenvolvió cerca a su mar de Pescaito, como así lo llama, aún con los recuerdos cuando su abuela Angélica María Jiménez le contaba que por ahí bajaba el pescado de Taganga hacia Santa Marta, mucho antes que el gobierno del presidente Rojas Pinilla ordenara la construcción de la carretera que hoy comunica a Santa Marta con este bello pueblo de pescadores, por eso en sus lienzos el bonito irrumpe, por las esquinas de sus cuadros, compenetrandose con los elementos y con la mujer, siendo la razón de ello es que antiguamente las mujeres tagangueras eran las que ofrecian el pescado para la venta por las calles de la ciudad.
"...El bonito es un pez que aparece en mi obra, pudiendose identificar mundialmente, por ello figuran como el elemento universal. Este pez es de la especia del atún, y se les encuentra de cola con ribetes amarillos en el caribe y de cola color negro rojizo es del tipo mediterráneo...", comenta Castilla.
San Andrés: Fauna y Flora.
En las isalas de San Andrés complementó sus estudios de la plástica en los Talleres "Dinámica de la plástica Contemporánea" y "Procesos", dirigidos por Miguel Angel Rojas y en "Visiones del Expresionismo",éste último a cargo de Raúl Cristancho; además de participar en las clases de "Fabricación del Papel artístico y Artesanal", a cargo de Nirma Zárate.
En la Isla el artista laboró como Profesor de Artes Plásticas en la Casa de la Cultura (de 1.984 a 1.994), vivencias que lo sumergieron y embrujaron para siempre de su Mar Caribe, lo que le ha servido para desplegarlo asi en su obra cons sus elementos reales acoplados con la magia de Neptuno, en lo que se entremezclan la fauna y flora del trópico, lo cual lo animó a plasmar en sus lienzos los productos del mar, los bellos paisajes y las mujeres del caribe colombiano, esas despampanantes morenas adornadas con cayenas y flores del trópico. Castilla dice que la cayena es la reina del trópico y de los mares, por eso en San Andrés se le declaró la flor insigne del Caribe en 1994, mucho tiempo después de haberla incorporado el artista como elemento natural a su obra plástica, por ello su trabajo tiene relevancia en San Andrés, que lo llevaría a ser el representante de Colombia antes los paises Bolivarianos, en la Quinta Semana Bolivariana en Duitama y Paipa (Boyacá).
Castilla es del sentir que "nadie es profeta en su tierra", asi lo demuestran las exposiciones en donde ha participado, siendo uno de los pintores samarios con mayor trayectoria y jerarquía en el arte pictórico, por ello sus obras estan en manos de importantes coleccionistas. Son obras que se exhiben con el tono punzante de los peces de su mar de Pescaito, lo que le marcaria su trabajo plástico por mucho tiempo.
Las Morenas de Castilla.
Las morenas que aparecen en los cuadros de Roberto Castilla, desde ya "inmortalizadas", por este artista son "...siempre las mismas modelos, una de ellas es Lorena Guerra Polo y Jazmín Rivadeneira, de padres samarios, ambas nacidas en pescaito. Cuando estaba en San Andrés en el festival de Luna Verde, conocí muchas mujeres hermosas del Caribe y por eso me impactó y por ello aparecen en mi obra, no necesariamente son mis modelos, ya que recuerdo, al pintarlas, a la cantaora, a la vendedora de pescao, la mujer que en si misma es la naturaleza...", concluye Castilla.
Elementos de su Obra.
Además de los ya narrados, encontramos en la obra de Castilla elementos como los trapos, el mármol, las vasijas greco-romanas, capiteles en el suelo, columnas erguidas con capiteles dóricos y el pez como observador de la escena.
Anecdota con Rafael Escalona en Valledupar.
Robero Castilla no puede borrar de su mente que en la sala del apartamento del maestro Rafael Escalona, en la ciudad de Bogotá, se encuentra colgado uno de sus cuadros, pero el como llegó alli hace parte de una historia que hoy lo ha llevado por despachos judiciales de la ciudad de Valledupar. Recuerda que fué invitado por la Casa de la Cultura de Valledupar para una exposición, acto donde también disertaria el famoso compositor Escalona, pero la Casa de la Cultura no canceló al maestro vallenato las sumas de dinero que habian acordado por sus honorarios del conversatorio y el cuadro fué el pago que el "Mono" Quintero dió como parte de pago, pero para Castilla el valor de dicho cuadro no ha sido consignado en su cuenta bancaria y por eso tiene demandado a la Casa de la Cultura de Valledupar. En Carta de Escalona "al maestro", como le dice Escalona al artista, se deja entrever que nada tioene que ver el autor de la Casa en el Aire, pero lo que si es cierto es que el cuadro permanece en casa del vallenato en la fría capital. Pero Castilla ha dejado el caso en mano de abogados, porque la pintura le llama y sigue pincelando y dando formas a su loable trabajo.
Recuerdo de Pintores Samarios.
Al maestro Roberto Castilla le circundan los recuerdos y le preocupan cosas como la muerte de Johnny de Castro, pero nadie ha rescatado ni se ha dedicado a escribir una obra para que quede consignada el quehacer artistico desde 1930 hasta hoy en Santa Marta y el Magdalena. En la años quer van posteriores a 1930, hasta 1970, inclusive, se hacian salones, con pintores como Diomedes Vargas, maestro del puntillismo, ya fallecido.
Dentro de la cultura samaria destaca Castilla a pintores como Bernardo Riascos, Sarita Abello, Josefina Diazgranados, al maestro Diomedes Vargas. A nivel nacional a David Manzur, ya que maneja una obra renacentista, Santiago Cárdenas, Darío Morales y del exterior al chileno Claudio Bravo, Guillermo Vera Muñoz (español) y dentro de los grandes maestros fallecidos a Rafael Szancio, Caravagio, Velásquez, Antonio López y Salvador Dalí. De todos los tiempos hasta hoy admira a Tiziano.
La Mitología de Roberto Castilla.
La parte mitológica en la obra de Roberto Castilla toma relevancia en sus nuevos cuadros, ya que su sentir es que en el Caribe el pintor es un soñador manejando una mitología local, eso lo lleva a plasmar un mundo de cosas presentes en la cotidianidad, él recuerda lo que le escuchó decir al maestro Jose Benito Barros, famoso compositor banqueño, que las mujeres usaban las espermas (Velas) para bailar la cumbia en las playas cercanas al río, de noche, para poder iluminar la danza y apreciar a su compañero. "...Para mi el fuego es mitológico -Apunta Castilla-, como Icaro, de ahi que a partir del fuego se crea todo, como el caso de los tambores que aparecen con el sonido que retumbaban en las naves que transportaban a los dioses, en la mitología de occidente...", según anota el artista samario.
Con la obra mitológica, espera, el artista, mostrar su interior, porque siempre su espiritu estará evolucionando, con toda esa mitología caribe, que le llevaría al campo universal, por cuanto para el la naturaleza es la mujer o viceversa, son las mujeres, asi mismo, diosas encarnadas, y los elementos que la rodean son sus dioses, como los linos finos, mármoles, columnas, parajes míticos.
Lo último plasmado por Castilla en su mitología griega y romana, lo llevó a remontarse por pegasos, ninfas y palacios mitológicos, con lo cual nos quiere recordar la tradición mitológica de la cuna de la cultura mundial.
En familia.
En su placentero estudio y por todos los rincones de su casa en Pescaito se percibe el olor a trementina y óleos, que día a día, le van dando forma a sus cuadros. Es característico en este artista plástico el mostrar, con la sencillez que lo caracteriza, las signularidades de las gentes que posan para su obra, confirmandose que las finas pinceladas nos dan a entender que, efectivamente, su trabajo va en alza. A la entrada de su residencia se encuentra un mural en honor a la bella flor de la cayena, que ha titulado: "Conversando con un Pez entre trapos transparentes y un cielo Caribeño", estancia que nos da la bienvenida a la residencia de este gran pintor del caribe colombiano, en la sala encontramos un triptico lienzo en donde se trabaja la inocencia, la alegria y la tristeza en el caribe, "...ya que nosotros pasamos de la inocencia a la alegria y luego a la tristeza y volvemos nuevamente a la inocencia, en donde se renueva la alegria...", nos menciona el artista.
Gala, su esposa, es la mano derecha durante su trabajo plástico, siendo la persona responsable, la que se ocupa de las compras de materiales como el lienzo, libros, pinturas, enmarcar las obras, efectuar las consignaciones, siendo además la que le brinda apoyo moral y material.
El cuadro familar lo complementan sus tres hijos: Roberto Junior, primogénito por su nombre; David Elias, en honor a un pintor francés llamado Luis Jacke Davis, con obras inmortales como retratos de Napoleón y otras obras de famosos; y Johnnatan Dalí, éste último en homenaje al pintor español Salvador Dalí. Estos hijos del maestro Roberto Castilla heredaron de su padre la vena artística, a excepción de su otro hijo Darwin R. Castilla, quién tomó otros menesteres en su vida, diferentes a la pintura.
Obra de Roberto Castilla y Exposiciones.
1991. Presencia Folclórica. Cámara de Comercio. San Andrés Islas.
1992. Galería Lincoln. Centro Colombo-Americano. Barranquilla.
1994. Retrospectiva. Cámara de Comercio. San Andrés Islas.
1995. Vivencia Caribe. Galería Lincoln. Centro Colombo-Americano. Barranquilla.
1996. Galería de Arte El Tulipan Negro. El Rodadero., Santa Marta.
1996. Galería de Arte El Tulipán Negro. Bogotá.